jueves, 22 de julio de 2010

A mi hermana a un mes de su partida.



“No te pares
al lado de mi tumba y solloces,
no estoy ahí, no duermo.
Soy un millar de vientos que soplan,
soy el destello del diamante sobre nieve.
Soy el reflejo de la luz sobre el grano maduro,
soy la lluvia benévola de otoño.
Cuando despiertes en la quietud de la mañana,
soy la exaltante prisa repentina
de mansos pájaros en vuelo circular,
soy las suaves estrellas que brillan por la noche.
No te pares al lado de mi tumba y solloces,
no estoy ahí, no he muerto."


Autor Desconocido

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